Habitacion y Despacho de Angela Strait

Al momento que aumento su rudeza gemi audible, siguiendolo con la misma intensidad, intentaba tener los ojos abiertos, pero me era imposible, no podia evitar gemir y casi gritar de placer, el sacaba lo pasional en mi, jamas me habia comportado asi, pero no me importaba, jamas me arrepentiria.

- Si..riu..s - dije su nombre en el momento que senti el orgasmo envolverme, estrechandome por completo, sonrojada.

Oye su grito casi desgarrador al parecer de placer, que solamente lo hace aumentar hasta donde podía su rudeza, sin querer lastimarla. Está a punto.

- Mmmh? - murmura al escucharla, moviendose en ella mientras la toma por los sus gluteos.

- mas.. - alcanzo a susurrar, a penas sabia que se estaba midiendo conmigo, pero necesitaba sentirlo plenamente, busque sus labios y los devore con pasion, explorando su boca con mi lengua, mas que llena de placer sintiendo mi orgasmo agrandarse y unirse a otro al sentir que el continuaba.

Sus deseos entonces, serian ordenes. Sonrie, esa sonrisa sinuosa y gamberra tan propia de él en esas ocasiones. Esa que podía llegar a ser casi divertida también. La besa siempre tan pasional y devorandosela casi. Si alguien entrara, en ese momento. Ellos podían asegurar que perdian su empleo.

No pensaba en otra cosa que no fuera que estaba en mi cama haciendo el amor con Sirius Black, entregandole mi cuerpo con demasiado placer y pasion.

Al menos por mi parte estaba siendo sumamente apasionada, dejandolo hacer mientras seguia gimiendo, sintiendo mi cuerpo ultrasensible a cada una de sus caricias.

Baja un momento y besa intenso sus pechos, mientras sus caricias siguen marcando ritmos en sus gluteos y él la sigue llenando se ese placer tan unico. Jadea fuerte, hombre. Sube sus labios a su cuello, mientras llega en ella.

Mis gemidos y el choque de nuestros cuerpos inundan la habitacion, puedo oir sus jadeos y sus lamidas en mis pechos, cada sensacion era unica con el, simplemente el mejor amante, subi un poco mis caderas para sentir mas placer y gemir a su ritmo, mientras mis manos se pasean por su espalda y dejarlas en sus gluteos mientras los aprieto a cada embestida.

Sienta cada una de sus caricias que solamente lo insitaban a querer seguir. LLega por fin en ella, quedandose allí aún, moviendose más lentamente ahora. - Fue.. mucho? - pregunta divertido, creia que esa vez había sido un poco más salvaje. Le sonrie aún, dejando que ella lo acaricie. Acariciando él a la vez, sus piernas.

Cuando lo senti llegar en mi, un orgasmo me inundo y cuando pregunto solo atine a negar, habia sido perfectamente genial, era cierto que habia sido rudo pero la verdad me habia encantado, subi mis manos por su espalda despacio acariciandolo con la yema de los dedos sin creer en lo que habia pasado, suspire despacio y lo mire, con esa maldita sonrisa que me derretia

Sigue acariciando sus piernas, sonriendole despreocupadamente. Sienta como el pecho de ella sube y baja, pero no dice nada. Solamente se dedica a mirarla y disfrutar de sus caricias - Entonces supongo que así es mejor - musita más para sí. Cuando ella niega.

Sonrio al escucharlo, me acerco y dejo un beso en su mandibula para atraerlo hacia mi y que deje caer su peso, mientras hundo mi rostro en su cuello, sin dejar de acariciarlo simplemente disfrutando de ese momento, que no sabia si se repetiria, o seria por unica vez, al fin y al cabo era Sirius Black, que podia esperar.

La acurruca en él, siguiendo con las caricias de una forma lenta y pausada. Quedandose allí con ella, por largo tiempo. La mira de a ratos y le sonrie con esa sonris atan suya que lograba derritir a más de una chica.

Sonrio y crei que hablar arruinaria ese momento, me mordi el labio no sabiendo si decirle que de no debia enterarse Ted de esto, pero la verdad sabia que no eran tan amigos como para que el se atreviera a contarle algo asi, asi que me quede callada ahi acurrucada en sus brazos, hablando trivialidades, de como molestaban a Snape de otras de sus travesuras, me reia de cada una de sus ocurrencias no por amabilidad si no que ahora no tenia que fingir que no me agradaban.

En eso aparecio una lechuza negra en la ventana y traia un paquete, con un movimiento de varita la deje entrar dejo el paquete en la mesita de noche y le abri la puerta de la habitacion para que se fuera hacerle compañia a Gray, reconocia bien la lechuza y mire el reloj, ya pasaban de las doce, sonrei y negue para mi.

Mientras me acurrucaba en los brazos de Sirius.

Solamente deja que pase el rato mientras hablan, sin tocar el tema de lo recién ocurrido, sino más bien de las travesuras y bromas que se habían ingeniado en Hogwarts los merodeadores y obviamente, él entraba en esa categoria.

Estaban hablando de una de las tantas bromas de Cornamenta y él cuando una lechuza negra ululea desde la ventana, amenazando con entrar. Le da su varita y ve como ella le abre el paquete y la lechuza sale para juntarse con Gray, quien estaba tranquila en el despacho. La acurruca más en sus brazos y le sonrie, volviendo la vista a ella.

Lo mire de una manera distinta y suspire mientras dejaba un beso dulce en sus labios, sin si quiera abrir el paquete, ya sabia que era, bueno al menos tenia una idea de que era, me acomode en sus brazos de nuevo mientras empezaba acariciar su espalda, simplemente disfrutando estar ahi.

- Qué trae el paquete? - pregunta solamnte de curioso, luego de que ella lo bese y él le dedique una pequeña sonrisa. Ya había dejado los mismos, pero una de sus manos aún yacia en su cintura y la otra estaba atrayendola hacía él, por sus hombros.

- es de Ted - mire sus labios y pase mi lengua por mis labios - debe ser mi regalo de cumpleaños - me acerco a el para darle un pequeño beso, sin dejar de pasar mis manos por su espalda.

- Ammmh - murmura, antes de rozar sus labios y besarla. No sabía cuando cumplia años, pero era mejor decirlo ahora - Cumples hoy? - pregunta, nunca había hablado tanto con ella como para saberlo.

Asenti - Nadie tiene ese dato.. solo Ted - no recibia regalos mas que de el y mis padres - recuerdas el paquete que te dije que eran unos libros - suspire - ese era el regalo de mis padres.. los pedieron por adelantado.. para.. que no se les olvidara - esa era la razon por la que odiaba mis cumpleaños, era solo un dia mas, que Ted adoraba celebrar.

- Entonces, debo comprar regalos - sonrie, besandola - Feliz cumpleaños, Angie - murmura en sus labios, atrapandolos otra vez. Siempre manteniendo esa pasión pero a la vez delicadeza con las mujeres, dandoles su espacio.

Sonrei y correspondi su beso, la verdad estar ahi con el era una MUY buena manera de celebrar su cumpleaños, lo atraje mas hacia mi intensificando el beso, simplemente por que no queria que esa noche acabara, y separarme de el.

Debia admitir que le gustaba pasar tiempo con ella, pero le costaria pensar que hacer después. Por ahora no piensa siquiera en ello, solamente la besa y sonrie en sus labios, a modo de felicitarla por sus 18 años.

Sonrei en sus labios - debo decirte.. que ese beso es.. un gran regalo - me muerdo el labio, y me senti como una idiota por decir eso y mas que seguro levantandole el ego - diablos el ego de Sirius Black acaba de aumentar - sonrio de lado y acaricio su rostro, despacio.

Sonrie cuando ella habla, acariciandola aún - Y yo que creia que eso era imposible - bromea, volviendo a atrapar sus labios. Le gustaba como era ella, y nunca creo que se comportaria así con él. Siempre la imagino más bien frivola.

Sonrei y lo bese despacio, hasta ese momento me doy cuenta de que me estoy comportando diferente, como solo lo hacia con Ted, la verdad nadie mas que el conocia como era yo, acaricie su espalda despacio sin dejar de besarlo.