Sufrirás pequeña...

Llega al ago aún con Alice arriba, soportando unos cuantos golpes de ella. - Ya casi llegamos - Rió, corriendo hacia el lago.

Alce la vista y mis ojos se abrieron aterrados al ver el lago. Me abracé a su cuello con fuerza – ¡Nooo, soy demasiado linda para caer al lago!

Paró de correr por un segundo - Deja de decir tonterias - bromeo, y siguio corriendo. Se mojó apenas los pies, dejando a ella intacta de agua. - Aqui esta bien cierto? - Dijo, riendo.

-Te juro que caigo y te vienes conmigo – Le dije con tono amenazante, mirando el agua debajo de mi.

-No me molesta el agua, no soy un gato - le sacó la lengua. - Ahora, vas a contarme? - canturreó, riendo.

Le hice un puchero – No tengo otra opción, ¿verdad?

-Noopp, no la tienes. - Caminó unos pies más hacia adelante, el agua ya casi tocaba los pies de ella.

-Ay, esta bien, te lo diré. - Levante un poco los pies, para no mojarme.

Sonrie, con tal suficiencia que parece no caber en su rostro. - Entooonces? - rie niño, alusinando.

-Pero sácame de aquí. – Le pedí, niña.

Nonono - Contraresto, inteligente - Yo te sacó de aquí, empiezas a correr... Y nunca más me lo dices - enarca las cejas, mirandola.

-Demonips - Masculle divertida.

-Ahhh te descubrí - sonrie de lado, divertido.

-Eres una mala persona. - Dije poniendo cara de victima.

-No, no lo soy - Le aclara - James Charlus Potter, un placer - la baja de su espalda, abrazandola por detrás, sin dejarle escape.

-¿Si te digo me dejaras en paz? - Pregunte.

-Sabes que no lo haré, siempre seguiré molestandote - Murmuro, riendo. La soltó despacio - Me quedaré con la duda, por ahora - rodo los ojos, sonriendo de lado.

Rodé los ojos -¿Aunque sea puedes prometerme que no le dirás a nadie?

-No se lo diría a nadie claro, pero.. es que ya no quiero saberlo. - Contesto, cambiante. Algo dentro de sí, negaba esa respuesta

-¿Y armaste tanto escandalo por nada? - Le pregunte arqueando una ceja, sonriendo.

-Exactamente el significado de Potter - le saca la lengua.

Suspire, negando con la cabeza. Me agache y le salpique un poco de agua, riendo.

Abre la boca, finjiendo indignación - Cómo.. Cómo osas mojar a James Potter? - tartamudea, quieto.

-Oh, disculpe señor Potter, pero si yo no mal recuerdo fue usted quien dijo que no era un gato y que el agua no le molestaba. – Me encogí de hombros, con inocencia.

-Son.. dos cosas distintas, en ese momento me mojaba por mi voluntar pero ahora, que me mojes tú - entrecierra los ojos, mirandola. - Rebalso en tarro, Huuum - Dió vuelta el rostro, evitando mirarla.