Celebrando a Angela

sonrei y los mire a ambos.
-Es un salon muy grande que encontre a las afueras de Londres. Por casualidad lo encontre. No es un salon en si, es de una familia. Pero me lo alquilan para ese dia. Y si Angie, necesito tu ayuda. Pero te aviso que soy dificil con las compras- le dije bromeando.

- Suena genial - mire a Ted y sonrei al fin se casaria con la mujer que el amaba, suspire a sabiendas que lo mio era una locura, me mordi el labio - esta bien.. no te preocupes.. yo tambien soy muy exigente en las compras- le dije con una gran sonrisa - por eso te dije que dos meses es poco... debieron esperar a menos seis - le sonrei a mi amigo.

La mire sorprendida y hubo suerte que no me atragantara con el vino.
-¿Seis meses? Ni loca espero seis meses para casarme con él- dije.
Y era cierto, ni aguantaria tanto.

Sonrei de lado al escuchar a Andromeda - mi novia tiene razon - le mande un beso - no se como le haces pero nos casamos en dos meses -le recalco a angela

Le sonrei a Ted y le tire un beso tambien. Comi un poco mas y tome. Mire a Angie esperando una respuesta.

Suspire - esta bien.. dos meses - mire a Andromeda - mañana mismo apartamos el lugar y compramos el vestido.. lo demas sera facil - tome un poco de vino

le sonrei y me acerque a abrazarla breve.
-Muchisimas gracias Angie! muchas muchas gracias- le agredeci mientras me alejaba de vuelta y me incorporaba.
Si dejaban todo en mi seria un desastre.

- No hay de que.. por TEddy .. lo que sea - sonrei ampliamente y tomaba mi copa pensando de nuevo en el, definitivamente habia sido un error, no por que no lo volveria a hacer, por que sin duda lo haria, error porque lo queria y para el era una conquista mas, suspire

Le sonrei comrendiendo y estaba decidida de matar a mi primo si le hacia algo. Termine de comer y fui por el postre.

Abraze a mi prometida - sabes que le pasa? - y estaba mas que seguro que si, Angela siempre habia sido retraida pero algo le pasaba estaba seguro.

Me mordi el labio indecisa pero agarrando el postre me di vuelta para encararlo aun en sus brazos.
-No puedo decirtelo. Es algo personal de ella. Habla con ella, te lo dira- dije, no podia decriselo yo, no era de mi incunbencia.